El dadaísmo fue un movimiento antiarte que surgió en suiza en 1916 iniciado por Tristan Tzara, que se caracterizó por sentimientos de protesta contra convenciones literarias, una actitud de burla por las manifestaciones artísticas literarias, por gestos y manifestaciones provocadoras en las que los artistas pretendían destruir todas las convenciones con respecto al arte, creando una especie de anti-arte o rebelión contra el orden establecido en aquella época.
Sus orígenes se localizan cuando una serie de artistas de distintas nacionalidades se encontraron como refugiados en Zúrich durante la Primera Guerra Mundial.
Artistas reconocidos de este movimiento fueron: Tristan Tzara y Marcel Jank de Rumanía, el francés Jean Arp y los alemanes Hugo Ball, Hans Richter y Richard Huelsenbeck.
El origen del término Dadaísmo es confuso. La versión más aceptada dice que este grupo de artistas, que buscaban el nombre del movimiento, abrieron un diccionario de Francés-Alemán al azar y señalaron una palabra. La palabra que apareció fue "dada", que en francés significa caballito de juguete, y fue adoptada para designar al grupo. "...El primer sonido que dice el niño expresa el primitivismo, el empezar desde cero, lo que nuestro arte tiene de nuevo".
Dadá se presenta como una ideología total, como una forma de vivir y como un rechazo absoluto de toda tradición o esquema anterior.
La expansión del mensaje dadá fue intensa, amplia y tuvo repercusiones en todos los campos artísticos.
El aporte permanente del dadaísmo al arte moderno es el cuestionamiento continuo de qué sea el arte o qué sea la poesía; la conciencia de que todo es una convención que puede ser cuestionada que por tanto no hay reglas fijas y eternas que legitimen de manera histórica lo artístico. Gran parte de lo que el arte actual tiene de provocación viene de dadá, la mezcla de géneros y materias propia del collage también deben mucho a dadá. La diferencia fundamental estriba en que el arte actual se toma en serio a sí mismo, mientras que el dadaísmo nunca olvidó el humor.
acerca de dadà y suprematismo
ResponderEliminartanto el dadà como el suprematismo son verdaderos bastiones de la ruptura del arte clasico y su transicion al arte moderno, el dadà iniciado por tristan tzara, es en cierta forma el antecedente del surrealismo, la espontaneidad y la incongruencia son sus bases, el poema dadà es un buen ejemplo y resumen de este movimiento, que tuvo entre sus seguidores a ertistas de la talla de picasso.
el suprematismo significo un verdadero vuelco en la pintura, pues reducia toda la esencia a figuras geometricas en su mayoria de colores planos. esto era proclamado por su creador como arte en si, supremo tal vez, era el arte en si.